Juego y tarot




No es ninguna novedad que el juego es un auxiliar muy importante para el aprendizaje en los niños pero también en los adultos, y el tarot no escapa de esta visión.

Para los especialistas en esta temática, como Carmen Minerva Torres 
(El juego como estrategia de aprendizaje en el aula  http://www.saber.ula.ve/bitstream/123456789/17543/2/carmen_torres.pdf)
“El juego es la actividad más agradable con la que cuenta el ser humano. Desde que nace hasta que tiene uso de razón el juego ha sido y es el eje que mueve sus expectativas para buscar un rato de descanso y esparcimiento… El juego, como elemento primordial en las estrategias para facilitar el aprendizaje, se considera como un conjunto de actividades agradables, cortas, divertidas, con reglas que permiten el fortalecimiento de los valores: respeto, tolerancia grupal e intergrupal, responsabilidad, solidaridad, confianza en sí mismo, seguridad, amor al prójimo, fomenta el compañerismo para compartir ideas, conocimientos, inquietudes, todos ellos – los valores- facilitan el esfuerzo para internalizar los conocimientos de manera significativa.

“El juego constituye un acto de  “creación” que tiene unas fuertes implicaciones sobre un rasgo innato en el ser humano que se ha revelado como imprescindible en nuestros días, la creatividad… Para el adulto, el juego tiene unos límites muy definidos, unas normas y reglas predeterminadas, además de una asignación de tiempo y espacio que usualmente no se solapa con actividades serias. Por tanto, la combinación juego y formación como actividad “reglada”, no es sencilla, ya que el carácter lúdico, espontáneo y natural que pretendemos impulsar podría perderse."

Por todas estas razones, los hemos incluido en nuestras actividades grupales. El juego en el adulto agiliza la mente, estimula la creatividad y abre la puerta para tener en cuenta otros puntos de vista sin imposiciones teóricas “cuasi inapelables”


Desde que comenzamos con el grupo centramos la idea en colocar juegos, o pasatiempos, que involucraran (de una u otra manera) arcanos que permitieran buscar nuevos costados en el aprendizaje del tarot, y así surgieron numerosas propuestas: comparaciones con diversas formas de la naturaleza (si fueran plantas, animales, paisajes) y un sinnúmero de asociaciones de las que no quedaron fuera las canciones, películas, cuentos infantiles, frases, arte pictórico y otras opciones.


Luego nos involucramos de manera personal, al colocarnos los atributos, y jugar a ser el mismísimo arcano, internalizando sus conceptos para poder así contestar las preguntas de los integrantes (Entrevistas con el arcano) y dejando entrever todos sus significados con las respuestas; o también, compararlos con algunas fotos personales, en posturas similares, o con el día que estábamos pasando, colocando los arquetipos en acción, tanto los mayores como los menores

Posteriormente, surgió el tema de las cartas invertidas, con las cuales muchas personas tienen problemas en el momento de interpretar, entonces ideamos un juego al que llamamos “Arcanos en el ring” (parafraseando a un viejo programa de televisión donde se enfrentaban distintos personajes) pero con el eslogan de “arcano que pelea es porque está “de cabeza” o en contra de sus comportamiento habitual”, en cuyo transcurso la creatividad de los integrantes se puso de manifiesto, al mismo tiempo que se divertían con las ocurrencias. La idea es esa: jugar y al mismo tiempo aprender sobre este antiguo arte, actualizándolo a las cosas cotidianas pero sin perder su esencia.


Quizás muchas personas, acostumbradas a la enseñanza tradicional del tarot, no comprende el estilo del aprendizaje a través del juego: el romper estructuras, y esperan hallar datos tradicionales, aunque los puedan encontrar  en cualquier libro, solo que no se molestan en buscarlos y esperan que se lo den en bandeja: que coloquen una carta y les digan “si sale al derecho es tal cosa y al revés, tal otra”.

Para quienes les gusta teorizar, o probar sus conocimientos (hecho que se ve en los programas de preguntas y respuestas donde tratamos de probarnos contestando en casa), también armamos acertijos, crucigramas, rompecabezas y muchos juegos “dementes”, donde se puedan accionar esos conocimientos teóricos y así completar las consignas. Nuestro propósito varía entre pasarla bien y la necesidad de lograr “abrir mentes”, para aumentar la percepción, jugar con la creatividad y así provocar a la intuición, para que haga acto de presencia en el momento oportuno..

Alguien dijo “Volved a ser como niños” y quizás esa sea la forma de romper muchas estructuras, creadas por la costumbre, y nos permita abrir la percepción a “algo más” y de eso se trata el tarot: de vislumbrar otras cosas que no se ven a simple vista, o solo se sospechan, ahondar en una problemática y buscar alternativas para que, quien consulta, sepa dónde está parado y decida si avanza o no. El futuro… luego se verá! Primero caminemos el presente…

Seguramente algún integrante, en una consulta, recuerde alguno de estos juegos y consiga dar más información al ver una carta que no solo sea lo que dijo el autor de turno. Jamás me voy a olvidar el “barwoman” de Nicolás Rosas, al ver a la Templanza y estar jugando al juego de las profesiones, ni las descripciones “atuendo/posicionales” de Marina Castagnino, que es capaz de darle la vuelta a un dobladillo para agregarlo a la interpretación del personaje, y eso solo lo da el liberarse al jugar .

“El tarot no deja de ser un juego, solo hay que atreverse a jugarlo”

Por eso, bienvenidos a nuestro blog

Adelante… a jugar!